Como ya sabéis, Jesús es una persona muy especial. Él es el hijo de Dios, y un día era la voluntad de su Padre que fuera al desierto para pasar algún tiempo a solas y pensar en las cosas importantes de la vida.
El desierto era un lugar muy solitario y desolado, sin comida ni agua. Jesús estuvo allí durante cuarenta días y cuarenta noches, y durante ese tiempo, no comió nada. Estaba muy hambriento.
Fue en ese momento que el diablo, que es una figura mala y tentadora, se acercó a Jesús. El diablo quería aprovecharse del hambre de Jesús y lo tentó con tres cosas diferentes.
La primera tentación
La primera tentación fue cuando el diablo le dijo a Jesús: «Si eres el hijo de Dios, convierte estas piedras en pan para saciar tu hambre». Pero Jesús respondió diciendo:
«Mas él respondiendo, dijo: Escrito está: No con solo el pan vivirá el hombre, mas con toda palabra que sale de la boca de Dios»
Jesús entendió que no solo necesitaba comida física, sino también la Palabra de Dios para vivir una vida plena.
La segunda tentación
Después, Jesús estaba a la cima de un edificio muy alto y el Diablo le dijo: «Si eres el hijo de Dios, échate abajo, porque los ángeles te salvarán». Pero Jesús respondió: «No tentarás al Señor tu Dios». Jesús sabía que no debía poner a prueba a Dios y confiar en Él en todo momento.
La tercera tentación
Por último, el diablo llevó a Jesús a una montaña alta y le mostró todos los reinos del mundo. Le dijo: «Te daré todo esto si te postras y me adoras». Pero Jesús respondió firmemente: «Vete, Satanás, porque está escrito: ‘Al Señor tu Dios adorarás y a Él solo servirás'».
Jesús sabía que solo Dios merecía nuestra adoración y servicio.
En cada tentación, Jesús resistió al diablo y no cayó en la trampa. Demostró su fuerza y su fe en Dios. Después de eso, el diablo finalmente se fue y Jesús fue cuidado y consolado por los ángeles.
¿Qué pueden aprender los niños de la historia de las 3 tentaciones de Jesús en el desierto?
- Resistir la tentación: La historia nos muestra cómo Jesús resistió las tentaciones del diablo. Nos enseña la importancia de no ceder ante cosas que sabemos que están mal o que no nos convienen. Aprendemos a tomar decisiones sabias y a mantenernos firmes en nuestra fe.
- Confianza en Dios: Jesús confió en Dios en todo momento. Nos enseña a confiar en Dios en nuestras vidas, incluso cuando enfrentamos dificultades o tentaciones. Podemos confiar en que Dios nos guiará y nos ayudará a superar cualquier obstáculo.
- El poder de la Palabra de Dios: Jesús utilizó las palabras de las Escrituras para responder a las tentaciones del diablo. Esto nos muestra la importancia de conocer y comprender la Palabra de Dios. Al estudiar la Biblia, podemos encontrar consejos y enseñanzas que nos ayudarán a enfrentar las tentaciones y tomar decisiones correctas.
- No poner a prueba a Dios: Jesús nos enseñó que no debemos poner a prueba a Dios. En lugar de desafiar a Dios, debemos confiar en Él y seguir su voluntad. Aprendemos a depender de Dios en todas las circunstancias y a buscar su guía en lugar de ponerlo a prueba.
Preguntas para niños sobre las 3 tentaciones de Jesús en el desierto
1. ¿Qué hizo el diablo para tratar de tentar a Jesús?
2. ¿Cómo respondió Jesús a las tentaciones del diablo?
3. ¿Qué lecciones podemos aprender de sus respuestas?
4. ¿Por qué crees que Jesús confió en Dios en medio de las tentaciones?
5. ¿Cómo podemos aplicar las enseñanzas de esta historia en nuestras propias vidas?
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