Para entender la historia de David, primero debemos conocer el contexto de su tiempo. Los israelitas, el pueblo elegido por Dios, vivían en una tierra llena de desafíos, rodeados por enemigos y gobernados por reyes.
Después de años de pedir un rey, Dios les concedió a Saúl, pero él no cumplió con las expectativas de Dios. Y es que Saúl valoraba más las opiniones y deseos de su gente y los suyos propios que la obediencia a Dios.
La elección de David
David era el hijo menor de Isaí, un hombre de Belén. Era pastor, un trabajo humilde, pero importante para su familia.
Dios, viendo que Saúl no era el rey que Israel necesitaba, envió a Samuel, un respetado profeta, para ungir al nuevo rey que había elegido. Dios guió a Samuel a elegir a David, no por su apariencia, sino por su corazón puro y su fe.
Y Jehová respondió á Samuel: No mires á su parecer, ni á lo grande de su estatura, porque yo lo desecho; porque Jehová mira no lo que el hombre mira; pues que el hombre mira lo que está delante de sus ojos, mas Jehová mira el corazón.
David y Goliat: la gran batalla
La historia de David y Goliat es una de las más famosas. Los israelitas estaban en guerra contra los filisteos, un pueblo enemigo. Goliat, un gigante filisteo, retaba diariamente a los israelitas a enviar a un guerrero para enfrentarlo. Todos temían, excepto David, quien era solo un joven pastor.
Con fe en Dios, David tomó su honda y cinco piedras lisas de un arroyo. Enfrentó a Goliat y, con una sola piedra y la ayuda de Dios, derrotó al gigante, mostrando que la fe es más poderosa que la fuerza física.
La vida de David en la corte de Saúl
Después de vencer a Goliat, David fue llevado a la corte del rey Saúl. Se convirtió en un líder militar exitoso, lo que provocó celos en Saúl. Saúl intentó matar a David en varias ocasiones, pero David, aun teniendo la oportunidad de hacerle daño a Saúl, eligió no hacerlo, demostrando su lealtad y su respeto por el ungido de Dios.
La huida y el ascenso al trono
David huyó de Saúl porque tenía miedo de que él y sus hombres le hicieran daño, viviendo como un fugitivo. Durante este tiempo, demostró ser un líder compasivo y sabio, ganándose la lealtad de muchos. Tras la muerte de Saúl y su hijo Jonatán (quien era el mejor amigo de David), David fue ungido rey de Judá y, más tarde, de todo Israel. Su reinado se caracterizó por la unificación de las tribus y la expansión del reino.
Los desafíos y éxitos de su Reinado
Como rey, David enfrentó muchos desafíos, incluyendo rebeliones y conflictos. Cometió errores y pecados, como su relación con Betsabé, pero siempre se arrepentía sinceramente y buscaba el perdón de Dios. Bajo su liderazgo, Israel se fortaleció y prosperó.
Su legado y la promesa de Dios
David es recordado por su corazón conforme al de Dios, su talento musical y como el autor de muchos Salmos. Dios hizo una promesa importante a David: su linaje sería eterno, una promesa que se cumplió con el nacimiento de Jesús, descendiente de David.
¿Qué enseña a los niños la historia de David?
- La fe es más fuerte que el tamaño: David era mucho más joven y pequeño que Goliat, pero tenía una gran fe en Dios. Esta historia nos enseña que no importa cuán grandes sean nuestros problemas o desafíos, con fe en Dios, podemos enfrentarlos y superarlos.
- Dios mira el corazón: Cuando Samuel fue a buscar al nuevo rey, pasó por alto a los hermanos mayores de David porque Dios le mostró que lo importante no es cómo nos vemos por fuera, sino lo que tenemos en el corazón. Esto nos enseña a valorar las cualidades internas como la bondad, la valentía y la honestidad, más que la apariencia o la fuerza física.
- La importancia del perdón y la misericordia: Aunque Saúl trató de hacerle daño a David, David nunca le devolvió el mal. Incluso tuvo la oportunidad de lastimar a Saúl, pero eligió perdonarlo y mostrar misericordia. Esto nos enseña a perdonar a los demás, incluso cuando nos hacen daño.
- Reconocer y corregir nuestros errores: David no fue perfecto; cometió errores. Pero lo importante es que cuando se daba cuenta de sus errores, pedía perdón a Dios y trataba de hacer las cosas bien. Esto nos enseña que todos cometemos errores, pero lo importante es aprender de ellos, pedir perdón y tratar de mejorar.
Preguntas para niños sobre la historia de David
1. Pregunta: ¿Qué trabajo tenía David antes de ser rey?
Respuesta Esperada: David era pastor de ovejas.
2. Pregunta: ¿Cómo venció David al gigante Goliat?
Respuesta Esperada: David venció a Goliat con una honda y una piedra, confiando en Dios para darle fuerza y precisión.
3. Pregunta: ¿Por qué Dios eligió a David para ser rey en lugar de sus hermanos mayores?
Respuesta Esperada: Dios eligió a David para ser rey porque miró su corazón y vio que era bueno y fiel, no solo su apariencia.
4. Pregunta: ¿Qué hizo David cuando tuvo la oportunidad de lastimar al rey Saúl?
Respuesta Esperada: David no lastimó a Saúl, aunque pudo hacerlo. En vez de eso, mostró perdón y misericordia.
5. Pregunta: ¿Qué nos enseña la historia de David sobre cometer errores?
Respuesta Esperada: La historia de David nos enseña que todos cometemos errores, pero lo importante es arrepentirse, pedir perdón y tratar de hacer lo correcto.
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